Imaginación + Honestidad con mucho enKanto en la Tragantúa

La Tragantúa tiene una situación excepcional ya que se encuentra entre las calles de huertas y de atocha, en una zona de MadriZ que es imprescindible visitar por todos nuestros Gastrocolegas.

Es imprescindible la reserva, no tiene muchas mesas pero el espacio está muy bien aprovechado. Todas las veces que he ido a comer la gente que lo ha intentado sin reserva no lo ha conseguido y son bastante estrictos con la hora de la reserva por este motivo. Debido al turismo de la zona se ve que el staff no tiene ningún problema en desenvolverse en un perfecto inglés. La carta también está traducida al inglés y es perfectamente visible desde fuera del local con lo cual atrae a un público turista que sabe perfectamente a lo que entra. El local no es muy grande y es la única pega que se le puede poner, pero seguramente es también parte de su magia.

Si trabajas por la zona, lo has visitado alguna vez al mediodía seguro. La noche tiene un ambiente más relajado y es cuando la carta cobra todo su protagonismo.

El logo de Tragantúa y su claim “Cocina Tradicional y eVolutiVa” está totalmente alineado con su propuesta gastronómica. La evolución del mono al Cocinero con el Cucharón en la mano hace que nos muestren una cocina sencilla, a la vez de creativa y cuidada. Yo lo resumiría en Imaginación más Honestidad en un sitio con mucho enKanto.

La Tragantúa es una atracción típica de las ferias con un muñeco gigante con la boca abierta por donde los niños se introducen y acaban saliendo en un tobogán por detrás.

Desde que entras por la puerta y te atienden notas que el trato con los clientes marca la diferencia en este Gastrobar.

La carta la tiene organizada en entrantes, ensaladas, carnes, pescados, arroces y pastas y finalmente postres. Podemos decir que es una cocina mediterránea y creativa.

Dentro de la propuesta de Pablo Fernández, gerente y jefe de sala, encontramos un menú del día asequible con cuatro primeros y cuatro segundos a elegir, donde siempre nos encontraremos productos de temporada. Desde luego, aquí se cumple la premisa de acercar la alta cocina a todos los bolsillos sin lugar a dudas.

También encontramos tres tipos de menú degustación A, B y C a 36,50€, 40,50€ y 49,50€ respectivamente donde vamos a una experiencia más larga y maridada.

Tradicional y evolutiva

De los entrantes os puedo recomendar, el Revuelto de boletus edulis trufado y desde luego las Milhojas de Tomates Verdes fritos, boletus y queso de cabra, para mí el plato estrella de los que hemos probado. Rico, Sabroso y que se te queda…

Como principales el Pulpo braseado con guacamole y patatas revolconas, no pican prácticamente. El Pollo Tai, lo hacen con una salsa muy conseguida.

Tarta de queso con base de cookies y chocolate blanco con cobertura de arándanos. Ojo a los golosos que con una ración para compartir sabe a poco.

La bodega es punto y aparte porque es extensa y con una selección no muy habitual de vinos pero no por ello de menos calidad y aquí es donde nos pusimos en sus manos y he de decir que acertaron con la recomendación de un tinto Drac Magic catalán, muy equilibrado.

Tiene una oferta del 10% reservando desde la web excepto en el menú del día y en las cenas de martes a jueves, también trabaja con el tenedor con un 30% de descuento a la carta.

Podemos comer perfectamente entre 25€-40€

Enjoy it!